La rectoría de la Universidad Autónoma de Tamaulipas se ha empecinado en un candidato de unidad, “el resultado está anunciado aun antes de las elecciones. Llegará con 25 votos de maestros y 25 votos de alumnos. Porque la votación para la elección de rector no es directa, es de representación, discriminatoria y al mismo tiempo desigual. En este esquema ni maestros ni alumnos cuentan. Votes o no votes, el candidato de unidad será rector”, denunció Luisa Álvarez Cervantes.
La doctora en Filosofía, aspirante a la Rectoría de la UAT señaló que la máxima casa de estudios de Tamaulipas “Queda evidenciada como una estructura corporativista. En donde secuestraron a dos figuras de la Educación Superior: Libertad de Catedra y Autonomía”.
En un texto que leyó en rueda de prensa dijo que “la lucha sigue, no nos rendimos”, e inició la segunda semana, hacia las elecciones en la UAT donde pidió elecciones libres en la Universidad.
Subrayó que sigue sin ser notificada oficialmente por parte de la Junta Permanente respecto a su solicitud para participar formalmente como candidata a rectoría.
CORREO INSTITUCIONAL BLOQUEADO
La docente de la Unidad Académica Multidisciplinaria de Ciencias y Humanidades de la UAT, denunció que “por órdenes de rectoría, han bloqueado mi correo institucional, con el fin de impedirme, haga uso de ese canal para enviar solicitudes de intervención a las distintas instancias de la universidad fin de subsanar las violaciones, de que he sido objeto a fin de dar paso, de aspirante a candidata a rectora”.
Llamo la atención a la opinión pública, sobre este hecho tan evidente de que rectoría controla los correos institucionales y las claves de acceso de cada uno de los maestros y estudiantes y se preguntó “¿Y este será el mecanismo de elección el próximo 30 de septiembre?”
Asimismo dio a conocer que recorrió todas las instancias universitarias.
- Solicite a los Consejos Técnicos, copia de las actas en las que, presentaron, ponderaron y valoraron a los tres aspirantes a candidatos a rector: Edgar Alberto López, Guillermo Mendoza, y su servidora, Luisa Álvarez. Y no tengo respuesta. Y fue por ello, que la Junta Permanente acepto el registro como aspirante a candidata a rectora de la UAT.
- Me hice presente, el 22 de septiembre y luego el 24 de septiembre, ante la Junta Permanente, mediante oficio, a fin de que me notificará, hora y lugar para exponer el Plan de Desarrollo Académico y administrativo de la UAT y tuvieran elementos a fin de valorar “la idoneidad”, de la que habla el Estatuto. Y nunca me notificaron. El Dr. Gustavo Gutiérrez Sánchez, no cumplió con su función, violando lo ordenado en el Estatuto y la convocatoria.
- Gire oficio al rector en su condición de presidente de la Asamblea a fin de que se conozca las resoluciones u omisiones de los Consejos Técnicos y no respondió.
- Gire oficio al Titular del Órgano Interno de Control, Leopoldo Bello Cano, en el que le solicito, investigue las conductas de los servidores públicos de la universidad. Se violaron mis derechos de petición, acceso a la información pública, y violencia política institucionalizada por razón de género. Y permaneció omiso.
- Envié oficio, a la Asamblea, a fin de que se constituyera la Comisión de Honor y Justicia, porque ninguna instancia universitaria me ha respondido. El proceso de elección de la UAT por consiguiente está viciado de origen. La violencia política por ser mujer quedo evidente. Se ha levantado contra mi todo el poder institucional de la UAT. 25 directores mismos que siendo presidentes de los Consejos Técnicos se sumaron a un acto de apoyo a un hombre que aún no era candidato pues no había sido votado por la Asamblea. Violentado mis derechos, pues la omisión es violencia.
Se me ha violentado políticamente por mi condición de mujer. Pero también han violentado a toda la comunidad universitaria. En el derecho humano más elemental. El votar y ser votado.