El expresidente de México, Felipe Calderón aseguró, sobre el caso García Luna que «quien infrinja la ley debe asumir las consecuencias de sus actos».
Calderón Hinojosa utilizó su cuenta de X para compartir un extenso mensaje en el que compartió sus impresiones después de la sentencia, en Estados Unidos, de uno de sus colaboradores más cercanos.
«No he tenido acceso a las evidencias ni a los testimonios que se presentaron en el juicio, pero soy hombre de leyes y respeto la acción de de los tribunales. Asumo que han actuado conforme a su leal saber y entender. Por lo mismo, soy partidario de que quien infrinja la ley debe asumir las consecuencias de sus actos», escribió.
Sobre el caso García Luna, señalo: 1) Nunca tuve evidencia verificable que lo involucrara con actividades ilícitas, ni tampoco recibí información en ese sentido de agencias de inteligencia, mexicanas o extranjeras, que entonces confiaban en él e interactuaban con él; 2) No he…
— Felipe Calderón 🇲🇽 (@FelipeCalderon) October 16, 2024
Sin embargo, el expresidente defendió su estrategia de seguridad y aseveró que «lo volvería a hacer», destacó que lo que ocurrió en este caso no demerita las acciones que se llevaron a cabo durante su sexenio.
«Este caso no demerita la lucha valiente que dieron miles de mujeres y hombres DEFENDER A MEXICO DE SU VERDADERO ENEMIGO, EL CRIMEN ORGANIZADO, aún a riesgo de su propia vida», señaló.
Además, apuntó que el nuevo gobierno tiene la oportunidad de corregir o fortalecer lo que se ha hecho en materia de seguridad y justicia en el país.
«El nuevo gobierno tiene la oportunidad de actuar eficazmente en defensa de las familias mexicanas. Puede fortalecer lo que se haya hecho bien, y corregir lo que se tenga que corregir, tanto de mi gobierno como de los que me sucedieron. Ojalá pueda convocar a una verdadera Política de Estado en materia de seguridad y justicia que, más allá de la polarización política, sume los esfuerzos de todos para derrotar al verdadero enemigo de México», puntualizó.
Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública de México durante el sexenio de Felipe Calderón, fue sentenciado a 38 años de cárcel en Estados Unidos.