El secretario de Obras Públicas de Tamaulipas, Pedro Cepeda Anaya dijo que serán concesionados 152 hectáreas de cinco ejidos para la carretera Rumbo Nuevo durante su comparecencia en el Poder Legislativo.
Aunque no precisó el número de afectados, señaló que son cerca de 300 ejidatarios quienes serán indemnizados por la privatización de este tramo.
El funcionario no reveló el monto dirigido a los ejidatarios pues la cantidad no se puede revelar por secrecía y seguridad.
Aclaró que lo que ocurre en la carretera Rumbo Nuevo es una concesión y no una privatización, como le reclamaron algunos legisladores en el Pleno del Congreso.
Y al ser cuestionado por la oposición sobre por qué no hubo una encuesta sobre la concesión, recordó que proyectos como la carretera Tam-Bajío nunca avanzó y tampoco se realizó alguna encuesta o se consultó la participación de las autoridades y privados.
Pese a las constantes manifestaciones y bloqueos, el secretario de Obras Públicas insistió en que se necesita el mantenimiento en la carretera por las malas condiciones en que se encuentra.
Mencionó que es tanto el gasto de inversión que por ello decidieron iniciar el proyecto de la construcción de la caseta.
“Es una inversión de 700 millones de pesos, tendríamos que dejar de invertir en el resto del estado para trabajar durante dos o tres años”, dijo.
Reiteró que, hasta el momento, el proyecto permanece suspendido hasta llegar a acuerdos con los ejidatarios inconformes.