Por Martha Olivia López
En media hora, un tornado dañó más de 30 viviendas del ejido San Jose del Llano, en Miquihuana, Tamaulipas el pasado jueves.
El fenómeno metereológico, uno de los más severos y destructivos que se producen, es una combinación de la fuerza del viento rotatorio que en ocasiones alcanza altas velocidades causó estragos en esta comunidad, una de las más pobres de la entidad.
“Estábamos tranquilos y de pronto, por el lado de San Luis Potosí en cuestión de segundo llegó el viento, granizo y una fuerte lluvia que hizo que volaran los techos de lámina”, dijo Ernesto Capetillo.
La señor Esther Gámez, se quedó sin el techo de su cocina y el excusado voló, “ojalá que a través de ustedes las autoridades volteen a vernos y saber que fuimos afectados por el tornado”.
Vecinos señalaron que de la Presidencia Municipal de Miquihuana enviaron a personal a tomar fotografías “pero hasta ahí quedó”.