Los 43 municipios del Estado están en la mira de la federación, sin ningún miramiento se los advirtió el Auditor Superior de la Federación, David Colmenares Paramo que llegó a Ciudad Victoria anunciar programas de auditorías, participar en conferencias y también a reconocer al gobierno de Américo Villarreal como uno de ellos dos que no tienen observaciones en su gasto público.
Se cierran las pinzas, recuerde que apenas en octubre del año pasado los alcaldes habían sido advertidos de una más rigurosa observación del gasto, se hizo en una reunión en Ciudad Victoria, aquel día todo parecía muy bonito, el 90 por ciento de los Secretarios no hacían otra cosa que hablarles de inversiones, programas, proyectos para sus terruños, pero la Contraloría y la Auditoria Superior del Estado les arruinaron casi todo el motivo de su felicidad, les adelantaban que la tolerancia al saqueo sería menor, que los programas ahora serían preventivos, es decir, casi en tiempo real las auditorias, también universales y hasta les ofrecieron capacitaciones para entregar cuentas públicas y resolver dudas en el manejo de los presupuestos.
Antes de ello, y con hechos, el gobierno de Américo Villarreal ponía las cartas sobre la mesa, advertía que es poca la tolerancia a los transas, dejan clara la situación con carpetas de investigación contra funcionarios del Instituto de Cultura, el Instituto del Deporte y de otras dependencias como Salud y Educación, con esos hechos daban constancia de ello.
El objetivo es claro, transparentar y hacer un uso eficiente del recurso público, tan era así que se predicaba con el ejemplo, meses después, ya en este año, la Auditoría Superior de la Federación distinguía a Tamaulipas como uno de los dos Estados sin observaciones en su gasto, algo nunca logrado en historia, los responsables de los gobiernos que se han ido siempre dejaron sospechas, bastante visibles la mayor de las veces, de saqueos, transas, raterías.
Entonces, las historias de los funcionarios de la actual administración llamados a cuentas son muy conocidas y deben servir de ejemplo para que las actuales autoridades municipales entiendan que ahora si van en serio y comiencen trabajar mejor y de forma transparente. ¿Por qué?, pues porque este jueves 12 de junio llegó a la capital del Estado el Auditor Superior de la Federación, David Colmenares y, como ya le detallamos, lo hizo con la espada desenvainada, sin ninguna cortesía les advirtió que este año los 43 municipios del Estado serán auditados en su gasto federal que es prácticamente el 90 por ciento de sus presupuestos.
Obvio, esto debe urgir a los alcaldes recordar lo que les advirtieron la Contraloría y la Auditoria Superior del Estado en octubre pasado, desempolvar los planes para modernizar códigos municipales y estatales, los puntos remarcados para que haya mayor eficiencia de ellos hacía sus conciudadanos, es decir, para facilitar el trabajo, las capacitaciones que recibieron para un control ético y riguroso de los dineros públicos, se les adelantó que el manejo de la administración debe ser de tal manera que no haya ningún gandalla que pueda sorprenderlos, también para que sepan perfectamente que se monitorea el recurso público, es decir, lo que ahora sucede no debe sorprenderlos.
Mire, una cosa deben tener claro las alcaldesas y los alcaldes, si en octubre pasado se les detalló que “Habrá un instrumento verdadero de rendición de cuentas, transparencia, de fiscalización, nada de auditorías simuladas, ni de chocolate”, con palabras del Auditor Superior, Francisco Noriega Orozco; o que “La obligación de todos es Transparencia y honradez”, como les dictó la Contralora Gubernamental, Norma Angélica Pedraza Melo, ahora el Auditor Superior llegó a informar que tienen la capacidad suficiente para que en Tamaulipas se auditen los 43 municipios y que no es cosa menor, porque la revisión del gasto será rigurosa y a fondo, más que eso, con la idea de castigar los malos manejos, es más, de prevenir los excesos.
Lo que sigue es que el Auditor pase de las palabras a los hechos, que haga efectivas las observaciones y los llame a cuentas a quienes lo merezcan.
Se siente que no fue demagogia lo dicho por el Auditor Superior de la Federación, les leyó la cartilla, otra vez, a los 43 ediles y eso es bueno porque ayudará a que cada centavo de los presupuestos pueda aterrizar y sentirse en el pueblo; otra realidad es que se les dejo claro que ya los tiene en la mira la ASF y que se actuará contra quien se quiera pasar de listo, nomás para que vea que no todo es contra los que ya se fueron qué, por cierto, apenas se cambien a jueces y magistrados en el Estado su suerte estará echada, empezará a cambiar…
(MV/AM)