Cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador acabó con los fideicomisos se puso el grito en el cielo por parte de los beneficiarios y opositores, la mayoría coincidían en que se trataba de caprichos, de una absurda venganza, que el acto pronto le golpearía en su realidad para demostrarle lo contraproducente de la acción, en el peor de los casos, que afectaría a los más pobres al quedarse sin acceso a recursos para emergencias
Algunas lluvias que causaron problemas, como Alberto en Tamaulipas, o los incendios, parecían la maldición gitana de los enemigos de la Cuatro T, no se tenía acceso a lo que antes se llamaba Fondo Nacional de Desastres, uno de tantos que fueron afectados por las políticas del pasado y el daño si era grave para muchos que perdían sus pertenencias.
Sin embargo, Claudia Sheinbaum, el tiempo, otra forma de gobernar, de organizarse, de administrar, han demostrado que la visión del expresidente no era tan errada, nomás no tuvo la gente capacitada para solucionar emergencias cuando fuera necesario, que se intentaba hacer, de eso no hay duda, pero no de forma tan eficiente como ahora, y le detallo.
Este viernes la Presidenta Claudia Sheinbaum estará en Tamaulipas en un acto más que simbólico o de interpretación, lo hará para demostrar el respaldo a la Cuatro T de este Estado, al gobernador Américo Villarreal, al pueblo que le dio su amor en votos y ahora le responderá en actos, aquí la razón del porque entramos con el tema de los desastres, porque primero visitará Reynosa para supervisar los avances en la atención de las víctimas de las inundaciones del 27 de marzo pasado, es decir, ya están resolviendo en lo posible la situación de más de 9 mil familias de alrededor de 25 colonias que terminaron bajo el agua, perdiéndolo todo.
No crea que llega al discurso solamente, trae un morral bajo el brazo, trae proyectos y se van a anunciar, trae acciones que demuestran que trabaja muy de la mano con Américo Villarreal y a pesar de todos los problemas que se observan con las autoridades de ese municipio, de las sospechas de mal uso de los recursos como se ha denunciado por los propios Diputados locales de Morena que le echaron en cara al alcalde Carlos Peña Ortiz invertir cientos de millones de pesos en gastos personales, que se puede traducir en beneficios para él, los suyos y no para el pueblo, luego explicaron que de acuerdo a los datos, los recursos que se gastan en Reynosa, en este rubro, servirían como presupuesto anual de 32 municipios del Estado, nomás para que se entere del tamaño del despilfarro.
Exacto, esos dineros bien invertidos habrían resuelto el problema de las inundaciones de Reynosa, pero su mamá que gobernó durante cinco años ese municipio, antes que él, tenía el mismo vicio de soportar el uso del presupuesto en el amplio rubro de gastos personales en lugar de destinarle más a las obras públicas, es decir, 8 años llevan con la misma dinámica.
Pero esos son temas tristes que se están viendo desde el Congreso, lo que ahora llama la atención es la respuesta rápida, esperemos eficiente y a largo plazo, que hace la presidenta de México Claudia Sheinbaum a los reynosenses, porque el acto en si es un tácito respaldo al gobernador Américo Villarreal, le demuestra confianza y queda claro que lo tiene contemplado entre los pilares del segundo piso de la transformación que ella diseña y se construye.
Claudia está demostrando que está muy lejos de ser como los presidentes del pasado, incluso diferente a Andrés Manuel, hasta hoy sus actos son más firmes, más sobrios, más de fondo, y con una visión diferente hacía el futuro, en lo que no cambia, es en su forma de hacer política, es una presidenta que tiene un equipo, que confía en él y que lo hará triunfar sobre cualquier eventualidad que se interponga, por eso le insisto, que venga una vez más a Tamaulipas, que lo haga para atender un tema muy difícil como fue una tragedia a Reynosa, que además vaya a Matamoros también con un tema primordial como es la vivienda digna, que además en cada mañanera utilice el espacio para que ella o su gabinete pongan los resultados del gobierno estatal de ejemplo, eso significa respaldo, que nos considera de los suyos, que efectivamente Américo es de sus favoritos, y que con los tamaulipecos no regatea para nada esa frase de que amor con amor se paga, le dimos votos, le damos respaldo a sus acciones dentro del Plan México, casi el 80 por ciento (cifra nunca antes vista) está con ella casi a muerte y la presidenta se deja querer con una respuesta que no necesita interpretaciones, con presupuestos para proyectos que serán soluciones.
Y pues bueno, así sí le entramos, porque por primera vez parece que a todos nos irá bien, no nos utilizarán más, mejor aún, ya no nos ningunean como se cansaron de hacerlo casi todos los del pasado y eso ya de entrada es mucha diferencia…