Cena de negros
Por Marco Antonio Vázquez Villanueva
La joven mujer, muy joven por cierto, y actual Secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde Lujan se perfila como nueva presidenta del Comité Ejecutivo Nacional de Morena, ella así lo hizo saber y algunas declaraciones de prominentes miembros de ese partido disiparon las dudas, es decir, solo será cuestión de tiempo para que tome el mando político del país o por lo menos de lo que será el partido más importante de este México lindo y querido en los próximos seis años.
Digo, no podemos soslayar que si prosperan las reformas que se avisaron Morena será quien motive los votos a favor de sus elegidos o elegidas, también el Morena será la que le entre a la guerra con la oposición que pretende reagruparse, sobre todo, deseará minar la imagen de la futura presidenta Claudia Sheinbaum intentando recuperar un poco del poder que les han arrebatado casi en su totalidad durante el sexenio de López Obrador.
¿Las implicaciones en Tamaulipas de la llegada de Alcalde Lujan?, sin duda que el gobernador Américo Villarreal será el más contento con el futuro, la actual Secretaria de Gobernación le ha reconocido públicamente y muchas veces como uno de los mejores gobernadores del país, como persona honesta y trabajadora, por supuesto, lo público solo refleja lo que presumen en el cuadro cercano, hay amistad y reconocimiento mutuo, respeto en el ámbito de cada uno de ellos.
Luego del gobernador la Senadora electa, Olga Sosa Ruiz, sería la segunda más afortunada en caso de concretarse el futuro nombramiento de Alcalde como presidenta de Morena, son amigas cercanas, se reconocen al ser de esas relaciones que crecen cuando se encuentran dos personas con los mismos objetivos, Luisa María era Secretaria del Trabajo a nivel federal cuando Olga ocupaba ese puesto en el gobierno de Tamaulipas, luego a la primera la llamó Andrés Manuel a la Secretaria de Gobernación y lejos de distanciarse continuaron con el trabajo para fortalecer sindicatos y relaciones laborales hasta concretar la candidatura que llevó al senado a la tamaulipeca.
Por supuesto, también crecen los proyectos de otras mujeres tamaulipecas, pero ninguno al nivel de la tampiqueña que solo requerirá trabajar fuerte y no cometer errores para cristalizar proyectos a futuro, proyectos que solo se verían truncados por eso de la paridad, yerros personales o acuerdos superiores entre las cúpulas de poder.
Es claro, entonces, que lejos de festinar y sentirse cerca de la gloría la primera tarea de Olga Sosa será la de aplacar a parte de su equipo, disciplinarlos, hacerles entender que en este momento solo hay un hombre fuerte y ese es el gobernador Américo Villarreal.
Luego tendrá que hacer comprender a los suyos que no han ganado nada, que la carrera apenas comienza y a esa competencia solo la futura presidenta, la doctora Claudia, invitará a los participantes y el gobernador Américo Villarreal será una especie de juez calificador, quien podrá expulsar o sumar participantes de acuerdo con los intereses del proyecto de la cuarta transformación y su segundo piso.
Vendrán, desde luego, nuevas participantes y nuevos pretendientes de la gubernatura para el 2028, todos tendrán sus padrinos en la Ciudad de México y en el Estado, claro que contarán las relaciones, obvio que serán de mucho peso las que tengan que ver con la cúpula partidista, sin embargo no lo será todo, llegarán en su momento los expedientes al escritorio donde se decide y esa voz de mando no tomará en cuenta solo la opinión de los Morenos, también contarán las manifestaciones del pueblo y terminará en acuerdos con los jefes políticos de cada Entidad su fallo inapelable.
Comenzará, esos sí, con mucha ventaja el género femenino la carrera por los principales puestos de elección popular en el 2027 y el 2028, la amistad que tienen muchas de ellas con prominentes hombres y mujeres del futuro así lo hace prever, pero nada esta escrito en piedra, en tres años se pueden construir proyectos nuevos, costarán más caros, pero son posibles y en cuatro años con mayor razón, porque habrá caídos y otros que crecerán en la elección intermedia de la presidenta.
Mire, seguramente en cuatro años más se asomarán, por ejemplo, en la carrera por la gubernatura, además de la ya mencionada Olga Sosa, la presidenta municipal de Nuevo Laredo, Carmen Lilia Cantú, igual la exalcaldesa de Reynosa y futura senadora Verde, Maky Ortiz, se agregarán personajes como Lucía Aimé Castillo en el caso de las mujeres que insistimos todo parece indicar que será su tiempo, pero tampoco se pueden confiar, cuatro años son muchos y cualquier caballero, con un trabajo metódico, eficiente y de mucho territorio se les puede adelantar, porque estas tres últimas mujeres para poder alcanzar sus objetivos además de mucho trabajo para lograrlo requerirán de recursos que demanda una competencia entre puros pesos pesados y quién sabe si tendrán la sabiduría para invertirlo de manera correcta, eso lo veremos por aquellos tiempos de mujeres, para los cuales falta mucho, hoy son los tiempos de Américo Villarreal y eso será lo principal a entender en las futuras carreras políticas…
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