Los casos de violencia familiar y de género se redujeron en Tamaulipas durante los primeros seis meses del Gobierno de Américo Villarreal Anaya, en comparación con los últimos seis meses de la administración de Francisco García Cabeza de Vaca.
Así lo arrojan cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Estatal de Seguridad Pública, que contrastó el total de llamadas al 911 para reportar incidentes de violencia de género.
Se compararon los registros de abril a septiembre de 2022 con los de octubre del año pasado a marzo de 2023.
Los casos de violencia familiar bajaron un 20.26%, al pasar de 2,157 a 1,720 (437 menos); los de violencia de pareja se redujeron un 20.82%, al pasar de 7,147 a 5,659 (1,488 menos).
Además, los casos de violencia familiar bajaron un 12.11%, de 6,439 a 5,659 (780 menos); y otros actos de violencia relacionados con la familia cayeron un 22.73%, de 1,122 a 867 (255 menos).
Los municipios con el mayor número de casos de violencia familiar y de género de octubre de 2022 a marzo de 2023 fueron Reynosa (2,840); Victoria (2,669); Matamoros (1,787); Altamira (1,747); y Tampico (1,373).
Cabe mencionar que en todos esos municipios se registró una caída en el número de llamadas al 911 para reportar casos de violencia familiar y de género.
El Gobierno de México define a la violencia familiar como el uso intencionado y repetido de la fuerza física o psicológica para controlar, manipular o atentar en contra de algún integrante de la familia.
Puede manifestarse también como abuso psicológico, sexual o económico y se da entre personas relacionadas afectivamente dentro del hogar.
Según el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), la violencia de género es toda conducta o amenaza que realiza un sexo hacia el otro (puede ser de hombre hacia la mujer o viceversa) de manera consciente y que causa daño físico, psicológico, sexual o económico.
Estas incluyen la violencia física (golpes, empujones, patadas, mordidas, entre otros); violencia psicológica (abandono, celos, insultos, humillaciones, desamor, infidelidad).
También se incluyen la violencia económica (limitaciones de dinero o posesiones que llevan a la dependencia y control sobre la persona afectada); y la violencia sexual (cuando se degrada o daña el cuerpo de otra persona sin tomar en cuenta sus deseos o ideas).