Corría el año 1948 cuando María Prisca Báez, Olga Villarreal, Ana María Ayala -fundadora del Diario de Victoria-, María Montoya, Abel García y Roberto Guerrero Villarreal, se integraron de colaboradores al diario Nueva Era -con reparto a domicilio-, dirigido por Cristóbal Garcilazo y Raúl Garza Juangorena, ex torero de Nuevo León, fundador del Heraldo de Victoria, Revista AVANTE y escritor de cuentos costumbristas.
La reciente publicación se convirtió en difusora de las acciones de Raúl Gárate y su esposa Herlinda Caballero, contrarrestando los ataques de Raúl Aceves, director del Heraldo de Victoria, lo cual que motivó su encarcelamiento por el gobernador militar. Finalmente esa acción represiva, ayudó para que El Heraldo sumara más lectores.
En febrero de 1952, al inicio del gobierno de Horacio Terán Zozaya se fundó Noticias «Diario Independiente» miembro de la Asociación de Periodistas Unidos de América, dirigido Natalia González de Joch. Tenía sus oficinas en la calle Matamoros 14 y 15 -residencia de su familia-. La gerencia estaba a cargo de Catarino Rodríguez, Jefe de Redacción, Sócrates, administrador Teófilo Joch y Juana G. de Lerma, corresponsal en Güémez.
El diario inició una campaña virulenta de ataques al gobernador Terán, a quien Natalia bajo el seudónimo La Negra, le dedicó el siguiente epigrama el día de muertos, donde refleja su fino sentido del humor:
Que grandota calavera,
dijo la muerte asustada,
y como no es nada antojada,
se lo echó a la faltriquera.
Con el amargo sabor,
de sus constantes fracasos,
se reventó en mil pedazos,
el César Emperador.
Y ahora todos tristes ven,
un epitafio que reza:
«descanse en paz la nobleza,
y Tamaulipas también.
El periódico contenía información internacional, local, fotografías, caricaturas, sección poética. anuncios comerciales, deportes y notas policiacas. Otro de los rivales de Joch, era Raúl Aceves Carmona director de El Heraldo, al reclamerle en las páginas de Noticias el adeudo de una imprenta marca “Perla”, motivo por el cual le dedicó una calavera literaria.
Este asqueroso sujeto,
alimaña de caverna,
sufre perdición eterna,
por mentecata y fregona.
Y es que su lengua mendaz,
al fin lo llevó a la fosa,
pero ni en ella reposa,
ni a la gente deja en paz.
A principios de la década de los cincuenta, la presencia femenil en periódicos locales fue determinante. Incluso, al integrarse la primera Asociación de Periodistas de Victoria por Lucio Mancha, Toribio «El Conde» Flandes, Héctor Herón Sánchez, Enrique Ávalos, Bernabé Rodríguez y otros reporteros, se incluyó a Oralia Mancha y Olga Pimentel R.
Con la presencia del gobernador Norberto Treviño Zapata y el poderoso publirrelacionista Emilio Villarreal Guerra, Director General de Información Prensa, Turismo y Relaciones Públicas, surgió una nueva etapa del cuidado de la imagen de la clase política en el poder. Para inyectarle un sentido profesional, Emilio contrató los servicios de Bladimir Joch González como Subdirector de Prensa.
De alguna manera, el periodismo femenil victorense, se fortaleció con el arribo de Aracely Solano Ortiz (México, D.F., 1926) y Emma González -hermana de la cantante de boleros Ana María González-, procedentes de la capital del país quienes acompañaron a Treviño Zapata, durante su gira de proselitismo a la gubernatura. Luego, decidieron radicar en la capital tamaulipeca, donde dirigieron el programa radiofónico: México en Marcha transmitido por XEBJ.
En las últimas décadas del siglo pasado, el empoderamiento de las mujeres aumentó considerablemente en el ámbito de reportaje político, editorial, sociales y cultura en medios escritos, radio y televisión. En tanto, aquellas periodistas de sociales pertenecientes a la vieja guardia: Olga Villarreal -autora de la columna «De Sociedad»-, Rosamina Aceves, María Elena Lerma -reportera y encargada de sociales del periódico El Diario, inaugurado en 1955-, encontrarían su relevo en: Aurelia de la Fuente y Refugio Garza, entre otras.